La pandemia del coronavirus y el confinamiento han sido una catástrofe para una gran parte de la población, aunque no parece que haya sido así para todo el mundo. Por ejemplo, 2020 ha sido un gran año para los comerciantes de bicicletas. Si nos fijamos en los datos de ventas, en España se vendieron el año pasado 1,5 millones de bicicletas, lo que ha supuesto un aumento del 25% con respecto a las cifras de 2019.
Este dato sirve para poner de manifiesto que la bici cuenta cada vez con más adeptos y que es una opción ideal tanto para tener un plan de fin de semana —ruta en bicicleta con amigos— como para moverte por la ciudad. De hecho, en los últimos años se ven muchas más bicicletas en las calzadas españolas, algo a lo que ha contribuido la creación de varios kilómetros de carril bici en un gran número de localidades del país.
Por qué es una buena idea moverte por la ciudad en bicicleta
Existen varias razones que confirman que desplazarte por la ciudad en bicicleta es una buena idea más allá de hacerlo por afición, por el mero gusto de pedalear y sentir la brisa en tu cara. Esos motivos son los siguientes:
- Razones económicas: la bici es el medio de transporte más barato de todos. Solo tienes que hacer un desembolso inicial para comprar una bicicleta nueva—y ahora las hay muy baratas o, si buscan un precio más bajo aún, puedes acudir al mercado de segunda mano— y hacer un gasto mínimo de mantenimiento; el precio de la cámara de una rueda de bici es infinitamente inferior al de un neumático del coche. No es necesario pagar seguro ni permiso de circulación, tampoco gasolina y, desde luego, puedes conseguir una bici por mucho menos de lo que te cuesta la letra de un coche e, incluso, de una motocicleta.
- Salud: tu cuerpo te agradecerá que cojas la bici a diario. La sociedad actual se ha acostumbrado a llevar una vida sedentaria en la que no nos movemos para nada. Nos pasamos todo el día sentados delante de una pantalla y nos desplazamos de un sitio a otro en coche, en metro, en bus… apenas movilizamos nuestro cuerpo y eso termina desembocando en una serie de problemas de salud. Montar en bicicleta es magnífico para hacer ejercicio cardiovascular y para que nuestro cuerpo no se oxide.
- Mejora la autoestima: estar en un buen estado de forma permite que nos veamos mejor y que estemos más a gusto con nosotros mismos y con nuestro cuerpo, lo que nos insufla vitalidad y refuerza la autoestima.
- Mayor energía: el mantenerse en movimiento y hacer ejercicio con regularidad es una buena forma de conseguir que te mantengas con más vigor y más energía.
- No contamina: se trata del medio de transporte más limpio de todos, ya que la energía que necesita para moverse proviene únicamente de tus piernas. No necesita ni gasolina ni electricidad y no produce emisiones de CO2, así que, si todos los habitantes urbanos se desplazasen a sus destinos en bicicleta, se solucionaría una gran parte del problema de la contaminación de las ciudades —aunque aún habría que gestionar las emisiones de las factorías industriales—.
Los inconvenientes de la bicicleta
A pesar de sus virtudes y sus beneficios, la bici no es un medio de transporte perfecto, por eso mismo vamos a ver dos cuestiones que merece la pena tener en consideración.
- Ciudades con muchas subidas: uno de los mayores problemas que plantea la bicicleta como vehículo de transporte es que se vuelve muy ineficaz en las localidades en las que hay muchas cuestas, sobre todo, si tienen mucha pendiente. Por ejemplo, Madrid no es la ciudad más idónea para desplazarse en bici. Sí lo es una ciudad como Sevilla, que es completamente llana. Las subidas entorpecen tu marcha y la del resto de vehículos —no hace falta incidir en la poca paciencia que tienen algunos conductores al volante— y hacen que moverte por la ciudad sea duro y poco higiénico, ya que, con tantas cuestas, lo normal es tener que hacer un gran esfuerzo, por lo que se puede sudar en exceso, en especial, en épocas de calor.
- Por tu seguridad, evita transitar por las grandes avenidas: si utilizas la bici para moverte por tu ciudad o tienes pensado hacerlo, hay un consejo que es importante que sigas: evitar circular con la bicicleta en las avenidas más grandes. ¿Por qué? Pues porque los coches acostumbran a rodar a una velocidad muy por encima del límite establecido por la ley. Ese contraste de velocidad entre vehículos motorizados y bicicletas, unido a la fragilidad del ciclista, hace que este tipo de calzadas sean un auténtico peligro para tu integridad física. De modo que, aunque el camino sea más largo, ve siempre por las calles en las que el tráfico alcance una menor velocidad.
En cualquier caso, montar en bicicleta es una actividad placentera y muy útil. Merece la pena empezar a generar la costumbre de coger la bicicleta.
Artículo en colaboración.
Suscríbete a la Newsletter y recibe Bio Eco Actual gratis cada mes en tu correo
Bio Eco Actual, tu mensual 100% ecológico
Leer Bio Eco Actual Mayo 2021