¿Es adecuado el sistema actual de etiquetado de productos?, ¿proporciona información clara y real sobre el valor nutricional y el impacto ambiental de los productos que consumimos? El sobrepeso masivo, las muertes prematuras relacionadas con la dieta y el aumento de los costes sanitarios a causa de las enfermedades no transmisibles causadas por la dieta son señales de la necesidad de acción urgente. 

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Informar a los consumidores, clave

El gobierno de la UE está dispuesto a tomar medidas contra la desnutrición para ayudar a los ciudadanos a elegir entre sus opciones alimentarias mediante un adecuado etiquetado de los alimentos, con estrategias como F2F. (Farm to Fork) (De la Granja a la Mesa, en su denominación en castellano).

La información que se da a los consumidores es esencial, pero precisamente esto es lo que no se cumple. Muchas personas no son capaces de entender sus estándares y, por tanto, tienen dificultades para alinear los productos que compran con sus pautas nutricionales, de ahí la necesidad de encontrar sistemas para entender fácilmente la información nutricional expresada en las etiquetas de los alimentos.

Nutri-Score: puntos fuertes y limitaciones

Los sistemas de etiquetado nutricional frontal (FoPL) destacan como una solución para ayudar a los consumidores a tomar decisiones alimentarias conscientes de la salud. De hecho, la Comisión cree que parece adecuado introducir un sistema de FoPL obligatorio armonizado a nivel de la UE. Uno de los sistemas FoPL más discutidos y favorecidos es Nutri-Score, que clasifica un producto en un sistema de cinco niveles según su valor nutricional neto, siendo “A” una puntuación preferible y “E” una puntuación perjudicial. Sin embargo, su eficacia ha sido ampliamente discutida. Los objetores señalan que el sistema no diferencia entre alimentos con aditivos y sin aditivos ni la calidad de la grasa de estos alimentos, lo que a menudo lleva a incorrecciones a la hora de clasificar si un alimento es más saludable que otro.

OPTA toma Nutri-Score como referencia de etiquetado, aunque añade algunas recomendaciones adicionales

En medio de esta discusión en curso, los miembros de la Asociación Europea de Comercio y Procesamiento Ecológico OPTA han adoptado recientemente una posición sobre el etiquetado y comunicación nutricionales. OPTA toma Nutri-Score como referencia de etiquetado en cuanto a un posible etiquetado obligatorio en el frontal del envase. “Nutri-Score traduce las recomendaciones nutricionales en una representación gráfica fácil de entender. Esto, y el hecho de que se haga una declaración global sobre el producto en cuestión (en lugar de mostrar una puntuación por nutriente), es la fuerza y la ventaja del concepto en comparación con otros sistemas de etiquetado FoP. Sin embargo, la condición previa esencial es que las directrices dietéticas que subrayan un concepto FoPL estén basadas en la evidencia”, afirma OPTA EU en un documento explicativo publicado en noviembre de 2021, pero añade algunas recomendaciones adicionales para mejorar este sistema.

Grado de procesamiento de los alimentos

Uno de los principales aspectos controvertidos es que Nutri-Score no contempla el grado de procesamiento de los alimentos, que tiene una alta incidencia sobre las enfermedades metabólicas relacionadas con la dieta en comparación con la mera composición de los macronutrientes. Los alimentos ultraprocesados a menudo tienen el efecto contrario e incentivan estilos de alimentación poco saludables: a menudo son ricos en azúcar y bajos en fibra y el uso intensivo de ingredientes como aromatizantes, colores y otros aditivos enmascaran las propiedades reales de los alimentos, y a menudo son el único motivo de su uso.

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Por tanto, a Nutri-Score le falta lo esencial, ya que el grado de procesamiento es tenido en cuenta, como mucho, indirectamente, por el sistema. Además, el sistema no se aplica a los productos frescos (verduras, legumbres, carne, pescado) ni a los productos con un solo ingrediente en su composición. Por eso, OPTA propone vincular Nutri-Score con el Nova-concept. Como consecuencia lógica, añade la organización, Nutri-Score también podría y debería aplicarse a los alimentos no procesados ya los monoproductos.

Compensación y aditivos

No se hace distinción entre los distintos tipos de azúcar y se sobrevalora la influencia de las calorías (mejor dicho: del concepto de calorías). “La cantidad de calorías es mucho menos importante que la forma en la que se consumen. La falsa creencia de que una caloría es igual a una caloría y que una ingesta de calorías más elevada per se tiene consecuencias negativas todavía parece estar vigente”, señala el documento de posición de OPTA. Sobre los ácidos grasos saturados, proponen la introducción de un parámetro adicional: la proporción de ácidos grasos omega-6 y omega-3, en los que los puntos negativos deberían aumentar a medida que aumenta la proporción. En cuanto a la sal, la organización propone adaptar el algoritmo para que la peor puntuación se consiga no sólo con el contenido de sal más alto sino también con el más bajo (relación dosis-respuesta en forma de U). “El papel de la sal debería verse más bien en relación con el papel de los alimentos ultraprocesados, que se tendría suficientemente en cuenta si también se tuviera en cuenta el grado de procesamiento”, especifica OPTA.

Propuestas como el etiquetado nutricional no pueden ser prometedoras si la gente carece de los conocimientos y la experiencia para entenderlas

“Los factores negativos pueden compensarse con factores positivos. Sin embargo, algunos de los factores correspondientes sólo tienen una conexión limitada entre ellos. Un producto rico en azúcar no puede mejorarse compensando con proteínas, porque uno no tiene nada que ver con el otro en términos de metabolismo”. OPTA propone adaptar el mecanismo de compensación de forma que sólo se compensan entre ellos los factores que se influyen mutuamente fisiológicamente y, por tanto, en relación con las correspondientes enfermedades metabólicas relacionadas con la dieta, que son: hidratos de carbono/fibras, fructosa/fibras, ácidos grasos omega-6/ácidos grasos omega-3.

Educación y prevención

Aunque se necesita toda la información científica, propuestas como el etiquetado nutricional tampoco pueden ser prometedoras si la gente no tiene conocimientos y experiencia para entenderlas e interpretarlas. Por tanto, Nutri-Score no debe sustituir o reducir otras actividades tales como la financiación de la educación nutricional y la alimentación de alta calidad en escuelas, universidades, hospitales y otras instituciones públicas. OPTA pide actuar: “la educación y la prevención, junto con la reformulación de los productos y, sobre todo, algunas correcciones de las pautas dietéticas, siguen siendo pilares importantes en la lucha contra las enfermedades relacionadas con la dieta”.

Considere hacerse miembro de OPTA, la Asociación de Comercio y Transformación Ecológica.

OPTA

Autora: Ariadna Coma, Periodista

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Bio Eco Actual Marzo 2022