Este año el Consell Català de la Producció Agrària Ecològica (CCPAE) celebra sus 25 años controlando y certificando los alimentos bio en Cataluña.
Han sido 25 años de récord. Hemos pasado de 200 a 4.000 operadores inscritos. De 5.000 a más de 200.000 hectáreas de superficie certificada. De empezar con un tejido empresarial muy pequeño a convertirse en el gran clúster agroalimentario ecológico del sur de Europa, con casi 2.000 industrias agroalimentarias y más de 40.000 productos certificados. El consumo interno crece y el volumen de facturación también. Cataluña es el gran mercado de alimentos bio de España y ya pone la mirada en los países del norte de Europa, líderes en consumo per cápita.
El modelo público ofrece calidad y eficiencia en sus servicios de certificación
Son varios los factores que han hecho posible esta historia de éxito. En primer lugar, el trabajo diario del equipo de profesionales que realizan las inspecciones (más de 5.100 controles físicos y documentales en 2018), que revisan y autorizan cada producto que se quiere comercializar como ecológico, que verifican que se cumple cada una de las normas del exigente reglamento europeo, que mantienen el registro actualizado para que todo agricultor, ganadero, elaborador o comercializador ecológico disponga de su certificado con las actividades y los productos autorizados para vender con las menciones y los sellos bio.
En segunda instancia, quisiera destacar la apuesta catalana por una certificación pública, que garantiza la participación de toda la cadena, desde el productor al consumidor, pasando por el elaborador y la administración, en las decisiones del órgano de gobierno de la autoridad de control. El modelo público ofrece calidad y eficiencia en sus servicios de certificación. No es casual que el CCPAE sea sinónimo de garantía y prestigio en todo el Estado y los mercados internacionales.
No es casual que el CCPAE sea sinónimo de garantía y prestigio en todo el Estado y los mercados internacionales
En último lugar, y no por ello menos importante, hay que poner en valor el empuje del tejido emprendedor catalán, que hace crecer el sector bio día tras día, labrando y cosechando, cuidando los rebaños y la tierra, levantando la persiana, haciendo red en el territorio, y ganándose la confianza del consumidor y los mercados. Sin su compromiso, no estaríamos donde estamos ahora.
El sector ecológico tiene el reto de continuar ofreciendo alimentos de la máxima calidad, respetuosos con la naturaleza, y sinceros con los consumidores. El CCPAE, por su parte, quiere aumentar la confianza de los consumidores en la certificación ecológica y mantener la credibilidad ante los mercados, trabajando para los operadores y la sociedad. Somos presente y futuro. ¡Felicidades, CCPAE!
Autor: David Torrelles Vilella, Presidente del Consell Català de la Producció Agrària Ecològica (CCPAE) | www.ccpae.cat
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