Es evidente que en las últimas décadas ha ido creciendo el interés de la sociedad por los temas de ecología y medio ambiente. El caso es que no se trata sólo de una demanda de información, es más que nada una imperiosa necesidad y una obligación, si queremos dejar a nuestros hijos un planeta habitable.

(Imagen: Pedro Pablo G. May (centro) dirigiendo “Mangas Verdes”)

Sobre esto, hemos charlado este mes con el periodista y escritor Pedro Pablo G. May. En la actualidad es adjunto a la dirección del departamento de Efeverde / Efefuturo, donde dirige y presenta el programa radiofónico “Mangas verdes” (con información medioambiental, biodiversidad, energías renovables, residuos, etc…) y el programa “Átomos y bits” (con información sobre ciencia y tecnología).

Con más de treinta años  en el mundo del periodismo y más de veinte libros publicados, entre ellos tres novelas, este incansable viajero nos confiesa que fue su fuerte vínculo con el mar el que le hizo adquirir, desde muy joven, la conciencia de  respeto por  la naturaleza. Y es que antes de bucear en la información comenzó a bucear con botella. “Mi presencia hoy en Efeverde es completamente lógica y coherente con mi trayectoria personal”, nos comenta Pedro Pablo.

Su programa “Mangas verdes” lleva unos seis meses en antena. “Era un proyecto que el departamento quería poner en marcha desde hace tiempo, porque trabajamos en todos los formatos (texto, video, gráfico, web…) y nos faltaba esa pata informativa”, nos explica. El programa se emite semanalmente a través del las emisoras de Eferadio (el servicio de radio de la Agencia EFE) y, a la semana siguiente, se cuelga en la plataforma de distribución gratuita de iVoox en Internet. Para Pedro Pablo es precisamente la red la que demuestra el interés social por el tema medioambiental.

Porque ante la pregunta sobre cómo ha evolucionado en los últimos años el espacio dedicado a los temas de ecología y medioambiente en los medios generalistas, Pedro Pablo G. May afirma con rotundidad que “ha empeorado claramente. Antes era más fácil encontrar por ejemplo suplementos de periódicos íntegramente dedicados a temas medioambientales o revistas que les dedicaban espacios. El problema en este caso es la fortísima crisis que atraviesa hoy el Periodismo en general que ha afectado mucho, debido a la reducción de recursos, a aquellos sectores más especializados como el nuestro. A cambio, en Internet se han multiplicado los sitios personales como blogs o páginas de Facebook dedicados a ellos

En opinión de Pedro Pablo, el tratamiento que se da en los medios generalistas a los temas de medioambiente y sostenibilidad es escueto, cuando no inexistente. “Muchos periodistas (y, lo peor, muchos redactores jefes) están tan desinformados, que siguen viendo estos temas como si fueran de segunda división o como si sólo interesaran a una capa reducida de la población. Y así lo transmiten a su público. Sin embargo, la sociedad cada vez demanda más información de este tipo”.

En cuanto a la postura de los políticos ante estos temas, Pedro Pablo lo ve claro: “Desgraciadamente, la mayoría de los políticos tampoco entienden su importancia ni sienten, como algo verdaderamente apremiante, la mejora de las condiciones medioambientales. La defensa de las causas verdes es, para ellos, algo “cool”, que les hace quedar bien en distintos foros públicos, pero poco más. Las grandes citas internacionales, por ejemplo para frenar el cambio climático, muchas veces se convierten en simples escenarios donde declamar una prosa tan bonita como insuficiente, cuando no en auténticos zocos para mercadear, como sucede con el inmenso negocio que promueve la compraventa de derechos de CO2”.

Al concluir nuestra charla y como sin darse cuenta, Pedro Pablo nos regala una receta para un planeta más habitablelo más urgente, con diferencia, es la educación medioambiental de las jóvenes generaciones: potenciarla y multiplicarla por todo el mundo, no sólo en los países occidentales. Cualquier otra medida que queramos tomar no es más que un parche mientras la gente no comprenda mayoritariamente que es esencial cuidar nuestro entorno. Sólo se protege lo que se ama y sólo se ama lo que se conoce”.