A lo largo de su historia, el sector agroalimentario ecológico español ha sido eminentemente agrícola, con producciones muy destacadas en aceite, vino, frutas y verduras, hortalizas y frutos secos; y orientado a la exportación habida cuenta del escaso desarrollo de un mercado interior, caracterizado por una demanda lastrada por el bajo desarrollo de la industria elaboradora, la disponibilidad de producto, su precio y el desconocimiento por parte del consumidor.

Tanto la superficie dedicada a la producción como su volumen han crecido año tras año, especialmente en el último decenio.

Fuente: Elaboración propia a partir de datos MAGRAMA: Estadísticas de agricultura ecológica. Haz click para ampliar.

Los datos más recientes publicados por el MAGRAMA este año apuntan a una estabilización o ligero crecimiento de la superficie, la producción y la transformación, es decir, de la capacidad del sector para abastecer el mercado de producto ecológico.

Este hecho contrasta con la tendencia observada, pendiente de confirmación oficial, de un significativo aumento de las exportaciones y del mercado interior; así como un aumento de las importaciones debido a la demanda de ciertos productos elaborados -de los que somos deficitarios- y a la creciente incorporación de fabricantes y distribuidores convencionales.

La comercialización del producto ecológico arrastra asuntos pendientes que hay que acometer para consolidar su crecimiento como son la falta de organización y vertebración, la mejora de las estrategias de marketing y gestión comercial y la mejora de la comunicación e imagen del sector ante consumidores, administraciones, organizaciones y otros sectores de la agroalimentación.

Este conjunto de circunstancias, puede generar desequilibrios entre la oferta y la demanda que podrían afectar a la consolidación y el futuro a medio plazo de un  sector ecológico nacional que, tras muchos esfuerzos durante varios años, ha llegado a ser uno de los principales a nivel europeo.

Tareas pendientes que se han ido dejando de lado por la necesidad de crecer son: organización sectorial, adecuación de oferta a demanda, desarrollo equilibrado del tejido industrial y las redes logísticas, diversificación de los canales de venta y mejora de su gestión comercial y de marketing, fortalecimiento y mejora de la comunicación e imagen del sector.

La evolución del mercado ya no permite más demoras. El sector se ha esforzado por crecer y lo ha hecho, ahora debe esforzarse por madurar. Los vientos son favorables y hay mucho que ganar si se hace rápido y bien.  

Autor: Pedro López Salcedo. www.provotec.es consultoría avanzada para el sector agroalimentario. Publicado en el Bio Eco Actual Mayo 2016