El pimiento, chile (del náhuatl: chīlli, ), ají o morrón es la especie más conocida, extendida y cultivada del género Capsicum (Capsicum annuum), una hortaliza (baya) de la familia Solanaceae, la misma a la cual pertenecen los tomates, las patatas, las berenjenas y unas 2.700 especies de plantas más.

Aunque hay muchos tipos de pimientos y guindillas, con distintas formas, tamaños, colores y sabores, picantes y no picantes, etc. todos pertenecen a la misma especie.

Es la hortaliza más rica en vitamina C

El pimiento fue domesticado hace unos 6000 años por los pueblos originarios de Mesoamérica, área donde todavía hoy se hallan algunas variedades silvestres, como la conocida con el nombre de chiltepín, chile soltero o chile loco. Originalmente, su sabor era muy picante y en su primer empleo alimenticio fue secado y molido, en calidad de especia. Cuando los primeros españoles ocuparon México, ya existían muchas variedades domesticadas y cultivadas por la población nativa.

Para el cultivo del pimiento se requiere una temperatura cálida, al menos unos 20 °C de promedio, sin demasiados cambios bruscos y una tasa de humedad no demasiado alta, gran cantidad de luz, sobre todo durante el primer período de crecimiento tras la germinación. Se puede cultivar en cualquier tipo de suelo, pero el ideal es el que posee buen drenaje, con presencia de arenas y materia orgánica. En la actualidad, la mayoría de pimientos son cultivados en invernaderos, pues el manejo de las condiciones exteriores es más controlable.

China es hoy el principal productor mundial

El sabor picante de algunos tipos de pimientos está determinado por la capsaicina, una sustancia alcaloide muy antioxidante que se encuentra ausente o limitada en las variedades de pimientos dulces.

El pimiento deshidratado y molido se emplea como especia, popularmente se conoce como pimentón (ahumado, dulce o picante) y en sus variedades más picantes como chili (palabra utilizada en América) o paprika (palabra utilizada en varios países europeos). Gracias al intenso sabor del pimentón, combinado con el ajo y otras especies, se elaboran muchas de las recetas de la charcutería tradicional ibérica. Dado que el peculiar sabor deriva de estos aromas, es posible adaptar las recetas a su versión 100% vegetal.

La expansión del cultivo del pimiento por todo el globo encuentra sus motivos en la ocupación del continente americano a partir del siglo XV. En 1.493, en las islas del Caribe, Cristóbal Colón y sus acompañantes fueron los primeros europeos en comer pimentón, por consiguiente, Colón importó los primeros ejemplares de pimientos para darlos a conocer en España y todo el continente Europeo, sin embargo, la hortaliza no resultó de agrado a causa de su sabor demasiado picante para el paladar de la época.

El pimiento no obtuvo éxito en las mesas europeas, al menos, hasta finales del siglo XIX y primeros años del siglo XX, cuando se desarrollaron las variedades más dulces y menos picantes. Precisamente, el apelativo “pimiento” deriva de pimienta, pues Cristóbal Colón había organizado su travesía por el Atlántico con la finalidad de llegar más rápido a la India y poder exportar especies a Europa. Colón quedó bastante sorprendido por el sabor picante del pimentón que, por su semejanza con la pimienta, confundió precisamente por una nueva variedad de pimienta roja.

Autora: Helena Escoda Casas, Licenciada en Historia (UAB)
Bio Eco Actual Julio-Agosto 2017