La popular frase de “menos es más”, podría ser empleada en el mundo de la aromaterapia para expresar muy adecuadamente la poderosa eficacia y el uso de los aceites esenciales.
¿Cuál es el uso de los aceites esenciales?
Como su nombre indica, los aceites esenciales (AE) son la esencia pura de la planta. Se trata de la esencia volátil de la planta aromática obtenida por arrastre de vapor de agua. Se emplea el término “esencia” y no “AE” cuando las moléculas, en lugar de por destilación, se extraen por expresión de la corteza (es decir exprimiendo), como es el caso de los cítricos. Hablamos de esencia de limón y no de AE de limón. Aunque son volátiles, se les llama “aceites” porque son lipófilos, o sea, no se mezclan con el agua sino con los cuerpos grasos. Por eso, y debido a lo potentes que son, se recomienda su dilución en aceites vegetales para su uso tópico. El tamaño de sus moléculas y esta atracción por los lípidos hacen que penetren con mayor facilidad en las capas de la piel. Es por esto también que, la precaución en su uso y la supervisión de un especialista son necesarias ya que, por ejemplo, en su aplicación inhalada, la cantidad y tiempo de exposición han de ser controlados porque pueden llegar a ser neurotóxicos.
Además de en la corteza, las moléculas de los AE se pueden encontrar en las diferentes partes de la planta (hojas, frutos, flores, semillas, raíces…).
La precaución en su uso y la supervisión de un especialista son necesarias
Variaciones químicas
La variedad de la especie de la planta, las condiciones climatológicas, el terreno, la altitud, el momento de recolección, la forma de extracción… van a dar lugar a diferentes calidades y a los llamados quimiotipos y subquimiotipos, que son las variaciones químicas en la composición de los diferentes aceites esenciales. Los AE son estructuras químicamente muy complejas, que dependiendo del aceite pueden tener hasta más de 100 componentes distintos y aunque un AE tenga una concentración alta de uno sólo, puede tener docenas de otros componentes. Es la sinergia de todos ellos en equilibrio la que confiere a los aceites propiedades tan eficaces.
Inhalación, vía tópica y vía oral
Las formas de administración más frecuentes de los AE son la inhalación (a través de un difusor aromático, de la inhalación directa del aceite en un pañuelo o prenda…), la vía tópica (a través su aplicación sobre la piel diluidos en aceites vegetales, cremas, champús… Existen puntos clave de absorción en el cuerpo como la coronilla, frente y sienes, sobre órganos vitales, plantas de los pies…) y la vía oral (competencia de médicos y aromaterapeutas expertos).
Pranarom
Fundado hace 30 años por el farmacéutico aromatólogo Dominique Baudoux, PRANAROM, laboratorio científico-médico, líder en aromaterapia científica, es referente mundial por la calidad de sus materias primas. Sus más de 300 aceites esenciales cuentan con la denominación AEQT, sello de calidad que lo avala. Los aceites esenciales están quimiotipados, son 100% puros y naturales y proceden de plantas, botánica y bioquímicamente definidas.
PRANAROM es uno de los pioneros en la investigación de aceites esenciales. Actualmente, la investigación sigue siendo una prioridad junto al desarrollo de nuevas formulaciones y áreas de aplicación de sus productos.
La Sinergia esencial bio es una sinergia multifuncional única con aceites esenciales de certificación ecológica. Sirve para el cuidado de la piel y de la mente, ya que calma, relaja y equilibra. Contiene aceites esenciales que se potencian entre ellos, sumando sus propiedades y ofreciendo un retorno al equilibrio y a la serenidad.
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Pranarom
Autora: Marta Gandarillas, Periodista especializada en Salud Natural, Titulada superior en Naturopatía y Terapeuta de Jin Shin Jyutsu
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