Un champú es un cosmético que se utiliza para la limpieza y cuidado del cabello. Además de lavar y dejar el cabello limpio y suelto tiene que aportar otros beneficios: sanearlo, proporcionar brillo y suavidad. Los champús de tratamiento se formulan para actuar frente a determinadas afecciones como pueden ser la caspa, la caída o la grasa.
En función del tipo de champú que vayamos a elaborar, seleccionaremos las materias primas y activos específicos adecuados para obtener la función y la eficacia requeridas al tipo de cabello.
Un champú se compone principalmente de una Base Detergente (tensoactivo) que se utiliza por su capacidad de limpieza y por sus propiedades espumantes. Los Principios Activos, pueden ser de origen vegetal, mineral o sintético, y se utilizan para dar una función concreta a la fórmula. También se emplean acondicionadores, estabilizadores y reguladores del pH. Por último se añade el conservante para que el producto sea seguro y estable en el tiempo, y el perfume para proporcionar un olor agradable.
Cuando la fase de investigación y desarrollo de un champú ha llegado a su fin, debe pasar las pruebas de estabilidad, de eficacia del conservante (Challenge Test) y de compatibilidad cutánea (Patch Test). Una vez superadas estas pruebas se procede a su fabricación. Tras el proceso de fabricación del champú, en el laboratorio se realizan los controles físico-químicos establecidos en los que se revisa el color, olor, aspecto, se ajusta el pH y la viscosidad, así como un análisis microbiológico para asegurar la calidad del champú. Cuando todos los test son conformes, se procede a su comercialización.
Todo el proceso que involucra la producción del champú se realiza en salas limpias o salas blancas. Este tipo de salas deben garantizar la protección del producto durante su fabricación, permitir una limpieza eficiente y minimizar el riesgo de contaminación cruzada de productos y materias primas. En estas salas se realizan controles de concentración de partículas en el aire, temperatura, humedad, presión diferencial entre salas, para asegurar que todas las manipulaciones del cosmético se harán en un entorno controlado.
BENEFICIOS DE UN CHAMPÚ ECOLÓGICO CERTIFICADO
- Garantiza el respeto por el medio ambiente
- +99% de los ingredientes son de origen natural
- +10% de los ingredientes proceden de la agricultura ecológica
- Base detergente de origen vegetal
- No contienen parabenos, siliconas, ftalatos, colorantes artificiales,…
Autora: Lola García, directora del departamento técnico de Corpore Sano – www.corporesano.com
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