Al finalizar el verano notamos que el cabello se nos cae más. No es un mito ni una sensación, es debido el fenómeno llamado caída estacional del cabello. Esta caída en realidad es resultado de la renovación natural del cabello, que se produce en los cambios de estación, con mayor fuerza en otoño.
La caída suele ser más acentuada en esta estación porque normalmente el cabello también se encuentra más debilitado debido a la alta exposición al sol y al calor durante los meses de verano, junto otros elementos como el cloro de las piscinas o la sal del mar. Todo ello provoca que el pelo se reseque y se vuelva más frágil.
A los humanos no se nos cae todo el cabello a la vez, como les ocurre a otros mamíferos, ya que cada uno de nuestro cabello puede encontrarse en una fase distinta del ciclo de crecimiento. Cada ciclo tiene tres fases. La primera es la fase de crecimiento en la que se encuentra el 90% del pelo y dura de media unos 3 años. Después se pasa a la fase de transición, que dura alrededor de 2 a 3 semanas donde el crecimiento se ralentiza. Finalmente, el cabello pasa a la fase de reposo, en que el pelo ya no crece. Puede permanecer en esta fase hasta 3 meses hasta que crece otro folículo o simplemente cae. Los folículos del cabello pueden completar hasta 30 ciclos, dependiendo de la persona, hasta que dejan de crecer definitivamente.
Entre finales de verano y principios de otoño, una gran cantidad de cabello puede estar en fase de reposo. Esto puede provocar una mayor caída del cabello en un periodo corto de tiempo, pero hay que tener en cuenta que cada persona tiene un ritmo distinto, pudiendo llegar a alargarse la caída durante los 3 meses de otoño. Además, esta caída es reversible, pues una vez finaliza, el cabello volverá a crecer. Si el periodo de caída dura más que 3 meses puede que se deba a otros motivos y se recomienda consultar a un especialista.
Aunque la caída es totalmente natural, unos buenos hábitos de cuidado capilar pueden fortalecer el cabello y frenarla
Hay que evitar, en la medida de lo posible, la exposición directa del pelo a altas temperaturas, como, por ejemplo, lavarse el cabello con agua muy caliente o el abuso de planchas y/o secadores. Las altas temperaturas suelen abrir más la cutícula del cabello y lo debilitan.
Otro consejo es peinarse con un cepillo de bambú o madera, que evita tirones y estimula el cuero cabelludo, favoreciendo el crecimiento capilar.
Nuestra rutina de higiene capilar es muy importante para no debilitar más el cabello. Las marcas de champú convencionales usan tensoactivos que generan mucha espuma como por ejemplo el SLS (Sodium Lauryl Sulfate). Pero estos tensoactivos tan agresivos y económicos también destruyen la protección natural del cabello y, conjuntamente con las siliconas, hacen que el pelo se reseque y se debilite más.
Usar un champú natural certificado Bio, no sólo respeta el cabello porque no contiene ni siliconas ni tensoactivos agresivos, sino que además, en su fórmula suele contener ingredientes naturales/Bio que ayudan a fortalecer el pelo como la avena Bio o el ginkgo Bio. Aparte de fortalecerlo es importante hidratarlo con aloe vera Bio o darle vitalidad, por ejemplo, con un extracto de manzana Bio.
Otros productos como acondicionadores y mascarillas sin siliconas o aceites vegetales para el cabello, como el argán, el aguacate o el coco, son también un buen complemento natural en la rutina de cuidado capilar que ayudan a tener el pelo más fuerte y previenen su caída.
Autora: Clara Bosch, Ingeniera y Máster en cosmética y dermofarmacia | www.naturcosmetika.com
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Y por la noche .? Es bueno recoger el pelo ? Cuando es muy largo…. antiguamente lo guardaban dentro de un gorrito en trenza o una coleta suave ??? Dos coletas suaves ?? Un moño suave ? Peinarlo por la.mañana y por la noche ? Una sola vez al día ?. Que tipo de coletero es el más suave ? Usar serum una vez a la semana .