El año 2022 ha sido difícil para todos pero ahora que ponemos en marcha el año 2023 es hora de marcar el camino a seguir para que en el año 2025 vivamos en un mundo más justo con las personas y el planeta. Nuestro esfuerzo y trabajo se centra en los productores. Debemos entre todos agregar valor a su trabajo y de esta forma conseguir aumentar las ventas y los ingresos para asegurar un futuro justo.
Tenemos que ir más allá de ser un sistema del que forman parte los productores a desarrollar estrategias empresariales entendiendo que debemos ser considerados como socios comerciales que no solo cubren la certificación, sino que desarrolla servicios innovadores conjuntamente con la auditora FLOCERT.
Pero nuestro trabajo no se centra solo en desarrollar herramientas sino también en impulsar esfuerzos de promoción que denuncien, impulsen capacidad de cambio y creen conciencia a nivel de los responsables políticos. Consideramos fundamental aumentar la conciencia, a nivel de la sociedad, sobre los enormes desafíos que enfrentan los pequeños agricultores, debido a los crecientes costos de producción las prácticas regulatorias injustas y las dificultades de acceso al mercado.
Los precios mínimos y la Prima Fairtrade son el eje fundamental del trabajo de Fairtrade
Eje fundamental de nuestro trabajo son los precios mínimos y la Prima Fairtrade, el fortalecimiento de estos dos estándares básicos permitirán conseguir precios más justos para las organizaciones de pequeños productores y enfrentar un entorno comercial volátil.
Debemos conseguir mejorar nuestra comunicación sobre el impacto, y solo conseguiremos más impacto a través de una mayor transparencia. Una nueva herramienta que es el Mapa de Riesgos de Comercio justo nos permitirá poner encima de los mayores riesgos de derechos humanos y ambientales en los sectores en los que trabajamos. Ser transparentes conlleva afrontar el riesgo mediante la colaboración con agricultores y trabajadores así como con los demás intervinientes en las cadenas de suministro sostenibles.
Las violaciones de los derechos humanos y los daños ambientales están muy extendidas en las cadenas de suministro globales. Uno de cada cinco trabajadores en todo el mundo vive en la pobreza, la producción agrícola es responsable del 70 por ciento de las retiradas de agua dulce en todo el mundo y el trabajo infantil está aumentando.
“Debemos entre todos agregar valor al trabajo de los productores y conseguir aumentar las ventas y los ingresos para asegurar futuro justo”
Sabemos que a corto plazo las empresas se verán enfrentadas a los requisitos de diligencia debida. Desde Fairtrade nos ofrecemos a facilitar el diálogo transparente entre los actores de la cadena de suministro y solo así contribuir con respuestas efectivas para las comunidades agrícolas y el planeta.
Consideramos fundamental como un derecho humano más el conseguir ingresos y salarios dignos. Fairtrade puede apoyar a las empresas en cada paso de la implementación de sus responsabilidades de diligencia debida, y en particular en la identificación, prevención y mitigación de daños y riesgos.
Por último, tenemos que saber comunicar de manera eficiente nuestros valores sociales y ambientales e impulsar cada vez más las decisiones de compra de los consumidores. Es un camino pleno de retos, pero juntos será posible afrontarlos y hacer que el futuro sea más justo.
Autor: Álvaro Goicoechea, director de Fairtrade Ibérica
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