Los consumidores quieren saber con certeza lo que compran y comen. Existe un hartazgo, con el consecuente rechazo, hacia los cada vez más complejos productos que llenan la cesta de la compra. Resulta muy complicado entender el contenido de los productos que compramos. Sus etiquetas son un galimatías que únicamente los químicos más avezados son capaces de interpretar.

Etiquetas y consumidores
La información del producto no hace más que confundir. Genera dudas sobre su idoneidad y las repercusiones que tendrá en la salud. Y es del todo comprensible. Las madres quieren que los alimentos que comen sus hijos les aporten beneficios nutricionales, y, sobre todo, que no perjudiquen su salud. De igual modo sucede con los adultos. Son plenamente conscientes de la necesidad de consumir alimentos lo menos alterados posible, que estén libres de contaminantes y de todo tipo de ingredientes artificiales.
El consumidor es cada vez más consciente de la necesidad de saber lo que consume, y lo que es básico, de dónde provienen esos alimentos que consume. Ya no se conforma con una etiqueta confusa que no induce más que a la desconfianza. En juego está la salud y la seguridad de ellos mismos, sus familias y sus mascotas. Y esta nueva actitud es la que está provocando un cambio de paradigma en la industria alimentaria.
El consumidor da cada vez mayor importancia a los productos con ingredientes reales y simples que le permitan llevar una vida saludable y sostenible
El consumidor da cada vez mayor importancia a los productos con ingredientes reales y simples que le permitan llevar una vida saludable y sostenible. Y como respuesta a esta necesidad es por lo que surge clean label o etiqueta limpia. Nace para satisfacer la demanda de productos elaborados con ingredientes naturales, simples, sin contaminantes industriales y ambientales. Etiqueta limpia se sustenta sobre dos conceptos, en el uso de ingredientes sencillos carentes de ningún tipo de artificio, y en la pureza de los ingredientes que componen el producto.
Significado de Clean label
Etiqueta limpia significa que a la hora de fabricar un producto se tiene que optar por la sencillez y la transparencia. Se debe usar la menor cantidad de ingredientes que sea posible y los componentes serán del conocimiento del consumidor. Los debe reconocer de inmediato, y lo que es básico, debe considerar que esos ingredientes son saludables. El consumidor exige ingredientes que conozca y que esté acostumbrado a manejar de habitual en su casa. Este enfoque excluye todo componente químico sintético e ingrediente artificial. Se acabó aditivar el producto a fin de dotarle de cualidades de las que carece y mejorar las que escasamente posee.
Esta nueva actitud es la que está provocando un cambio de paradigma en la industria alimentaria
El consumidor no tiene por qué saber de términos científicos. Se le escapa la nomenclatura química. El consumidor quiere que en la etiqueta ponga términos que conozca y con los que está familiarizado. Veamos ejemplos. Es habitual encontrar en la etiqueta del alimento el termino ácido ascórbico. El consumidor desconoce qué es y le da la imagen de un producto artificial. Si se sustituye por vitamina C, el consumidor lo reconoce y acepta, ya que es un término familiar que se entiende como natural. Si un producto contiene tocoferol, el consumidor es poco probable que lo asocie con la vitamina E. Al no conocer el término se produce desconfianza. Pero si se dice vitamina E la reacción será la inversa, positiva, y el producto es apreciado. Esta preferencia del consumidor posiciona a etiqueta limpia como garantía de ingredientes naturales, buenos para la salud y beneficiosos para el organismo.
RECOMENDADO POR
Sol Natural
Autor: Raúl Martínez, Dietista-nutricionista, biólogo
Suscríbete a la Newsletter y recibe Bio Eco Actual gratis cada mes en tu correo
Bio Eco Actual, tu mensual 100% ecológico
Leer Bio Eco Actual Febrero 2022